lunes, 15 de febrero de 2010

Transcending CSS



Una vez terminada la primera vuelta al libro, pienso que es un buen momento para opinar sobre el mismo.
En primer lugar, se trata de un libro más orientado al diseño y a diseñadores (web en este caso) que al desarrollo. Esto, es algo que hace que su lectura sea más ligera que los habituales libros del tema y que no requiera tanto "ver para creer". En realidad, más que un manual al uso se trata casi de un manifiesto para intentar conseguir que las CSS escritas hoy sigan siendo válidas (a todos los niveles) mañana. Para ello, se comienza con una especie de estado del arte del desarrollo de hojas de estilo actualmente y se continua con un método de trabajo (workflow) que el autor, Andy Clarke, considera el más recomendable para trabajar en la web y que principalmente está basado en la creación de prototipos con HTML y CSS para un solo navegador como herramienta de validación con clientes y el resto del equipo.
Tras estos capítulos más introductorios, se trata el tema del diseño web mediante grids y se termina con el capítulo más orientado a la implementación de las ideas que se han venido tratando a lo largo del libro, que probablemente será el capítulo favorito de los lectores más técnicos.
En mi opinión, se trata de un libro muy interesante tanto para personal técnico como para personal de diseño ya que, todos podrán aprender cosas interesantes del mismo. Además, en el caso del personal técnico, considero que puede contribuir a entender mejor el trabajo del diseñador que, lejos de lo que en muchos casos se piensa, no tiene nada de mágico o esotérico sino que está basado en una serie de reglas que debe saberse cuando respetar y cuando romper. También decir que, al igual que siempre, no se puede tomar como una verdad universal y que, de hecho, varios aspectos tratados son, sin duda, algo polémicos, como el uso de los microformatos (lo que menos me gusta en este sentido es que ni siquiera se mencionan otras alternativas como RDFa).
Como inconveniente, decir que, a pesar de estar traducido a 8 idiomas, ninguno de ellos es el español, por lo que probablemente se termine por optar por su versión original en inglés.

domingo, 14 de febrero de 2010

Particiones de disco en Windows 7

Una de las tareas más frecuentes a la hora de particionar un disco es la de crear una partición para los datos. El motivo es que, en caso de haber un problema con el sistema operativo, se puede formatear la unidad (o partición) que lo contiene y los datos almacenados en otras unidades no se tocan. Por otro lado, también ayuda a tener el ordenador mejor organizado.
Para realizar las particiones de disco con Windows XP resultaba sencillo tanto si se deseaba hacer con un programa específico (el más famoso era el Partition Magic) como si se deseaba hacer durante la instalación del sistema operativo. El problema con el Windows 7 es que el Partition Magic no es compatible (lleva varios años sin actualizarse), aunque también se podría hacer con una instalación portable en un lápiz.
Una solución para realizar esta tarea en Windows 7 puede ser utilizar las herramientas proporcionadas por el propio sistema operativo:

  1. Abrir Inicio -> Panel de Control -> Sistema y Seguridad -> Crear y formatear particiones de disco duro (abajo del todo)

  2. Se selecciona el volumen a reducir (normalmente C:) y se hace clic con el botón derecho, eligiendo la opción "Reducir Volumen".

  3. Se indica la reducción en MB (por ejemplo 50000 serían aproximadamente 50GB) y se procede a la reducción.

  4. Una vez reducido, aparecerá un espacio sin asignar en el disco. Botón derecho-> "Nuevo volumen simple"

  5. Se sigue el asistente asignando la letra que se desee y formateando después con NTFS

  6. Una vez que se acabe el formateo la nueva unidad estará lista para utilizar


Y con esto tendremos nuestra flamante nueva partición de datos: rápido, sencillo y para toda la familia, amigos ;)